domingo, 17 de febrero de 2008

Y QUE PASA LUEGO CON ELLAS ???

Es mucha la gente que, a través de este blog o del correo electrónico, me viene preguntando por el futuro de las niñas de la Troncal.
Llevo días intentando encontrar la forma de escribir esto sin resultar fría o cruel.
Yo misma me planteo cada día es misma cuestión, cuando cierro esa cancela y dejo tras de mí esas caras que me miran entre las rejas, diciéndome adiós hasta perderme de vista al doblar la esquina.
Cierro esa cancela y salgo literalmente a otro mundo, como lo harán ellas el día en que les toque abandonar la institución.
Cada vez que una niña se marcha, la asistente social comprueba que la vivienda familiar está en condiciones adecuadas, pero ¿ cuáles son esas condiciones ?
Algunas veces está claro: no hay agua potable accesible, no hay ninguna fuente de ingresos en la familia, otras no es tan fácil de identificar ni medir cuantitativamente.
No se puede medir el cariño de los que las rodean, ni el mayor o menor grado de alcoholismo de su tío o su papá, no se puede saber con certeza si alguien cercano tiene en mente abusar de ellas un día de estos...
En cuanto a las condiciones de la vivienda, podríamos considerar inadecuado un piso - suelo - de cemento, sin embargo, deja de serlo cuando uno se percata de cuántas viviendas se sostienen sobre puro barro, o sobre un ridículo pilar de madera carcomida, bajo un techo de cartón.
En realidad, a casi ninguna le espera algo que a nuestros ojos pueda considerarse habitable, sin embargo, y ésta es la frase, ES LO QUE HAY.
¿ Sirve de algo alimentarlas para que luego tengan que pasar hambre?
¿ Resulta constructivo o frustrante despertar en ellas la inquietud de progresar si se van a dar de frente con una realidad que es puro obstáculo?
Todo es a veces tan relativo y confuso...
No tengo respuesta clara para la gran pregunta, y cada niña es distinta y tiene su problemática particular.
Por otro lado, ninguna institución se hace cargo de ellas una vez cumplidos los 18, y lo que les toca entonces es duro, muy duro, de afrontar.
Se les ha capacitado en diversas materias, y en algunas ocasiones ha sido posible encontrarlas algún trabajito para subsistir, pero en otras, el universo entero parece haberse vuelto en su contra.
Te piden plata para reformar la casa, te piden que te las lleves a España contigo, incluso alguna te ofrece quedarte con su bebé.
Las ONG ayudan, y mucho, a mejorar la situación de multitud de personas, hombres, mujeres y niños, pero no seamos ingenuos, ni deleguemos tampoco en ellas o en los gobiernos el deber de apoyar al desfavorecido.
De poco sirven estas organizaciones si no somos capaces de reconocer a un ser humano con sus derechos, con su dignidad, en ese niño harapiento y maloliente que se nos acerca en la calle mendingando unas monedas.

De poco sirve su trabajo si el resto de la sociedad - en España o en Colombia - no lo respalda.

Las ONG las forman personas, más o menos concienciadas, más o menos solidarias, más o menos torpes, más o menos capaces... y todas, como organizaciones humanas que son, hacen las cosas como buenamente saben y como buenamente pueden.

Es correcto cuestionarse su funcionamiento y su utilidad, pero más correcto aún es empezar por uno mismo, plantearnos cada uno de nosotros si realmente vivimos, en nuestro respectivo "mundo" (aunque al final, mundo sólo hay uno y todos formamos parte de él) con esos mismos valores, con esa misma solidaridad que reclamamos de gobiernos e instituciones.

El futuro de las niñas, depende por tanto de ellas mismas, y de Juanito Garcia Pérez, de Marianita González Gutiérrez, de Pedrito López de la Hoz.... y por supuesto, de Maite Catalá Sverdrup, la que suscribe. (Aquí, para servirles, con mucho gusto).

4 comentarios:

manolo dijo...

Se nota que se acerca tu regreso a España. Te pones sensible y te rebelas contra lo que ves , pero es por pura angustia al ver que resolver este problema es casi imposible. Mira yo creo que has empezado a resolverlo estando ahi con ellas y ayudandolas en el dia a dia.Creo que estas chicas tendran el futuro que cada una sea capaz de tener con el coraje de cada una pero hay una cosa que nunca van a olvidar en su vida y es su paso por esa institucion y de las personas que las ayudaron como tu. Asi que animo y pa lante como decimos por aqui . Un besito de tu tio manolo.

maite dijo...

MANOLO, I LOVE YOU !!

ENRIQUE CONDE dijo...

.
Querida Cuchi:

Merece la pena, poco a poco, gesto a gesto, lágrima a lágrima, minuto a minuto, no te quepa duda de que el mundo es cada vez mejor, aunque no te lo puedas creer, y TU AYUDAS a ello y haces que merezca la pena

Mil besos

Kikecon

RODOLFO dijo...

Aunque tus vivencias en Cartagena con la gente oprimida, abusada y desplazada son un ejemplo de vida para quienes hemos tenido la fortuna de leerte y conocerte, dejan un sentimiento de intranquilidad y de insatisfacción con la sociedad y con uno mismo, al saber que personas como tu, lejanas geograficamente al problema, pueden contribuir a mitigar la desgracia, y quienes estamos tan cerca geograficamente del problema, somos indiferentes, cuando no indolentes con la desgracia de quienes conviven con nosotros en esta ciudad y en cualquier parte del mundo.
Ojala tu influencia en quienes te conocemos, logre tambien transformar nuestra indiferencia.