lunes, 18 de febrero de 2008

DE COMO LUIS FELIPE APRENDIO A SUMAR

Hoy tocaba visita al hogar de Niños de Papel en el barrio de Canapote.

En total hay 15 chicos, entre los 10 y los 18 años. Aún no han comenzado las clases en el colegio, así que por las mañanas tienen clases de refuerzo escolar para irlos preparando, pero claro, no todos tienen el mismo nivel y sólo hay un tablero y una profesora.

Sobre el tablero tremendas sumas que algunos resuelven con facilidad, otros van más lentos, y luego está Luis Felipe...

Luis Felipe demora 15 minutos en escribir el "título" de la lección: RE - FUER - ZO MA - TE - MA- TI- CO.

Le digo que vaya copiándose las sumas y deje el título para más tarde para poder sincronizarse con sus compañeros, me dice que sí, pero sigue escribiendo RE - FUER- ZO

Acabo escribiéndole yo misma las sumas en el cuaderno. Y me pongo a su lado. " A ver, Luis Felipe, empezamos por la primera columna, 4 + 3, a ver cuánto da eso ?? Me mira pensativo y me dice: "Uno, no, dos, tía, no ??". Mmmm. Vaya, parece que las sumas básicas no son su fuerte... así que de las del tablero nos tendremos que olvidar de momento.

Me lo llevo al tablero y le pongo una más fácil. 2 + 1.

Luis Felipe me mira con gesto de frustración y me dice: "tía, es que yo no me sé las vocales".

Me hunde en la miseria. Las vocales.... "No te preocupes, Luis Felipe, que las vocales son letras y esto son números que son otra cosa bien distinta, así que para esto no las necesitamos, estamos de suerte".

Nos volvemos a sentar. Le hago una lista con los números del uno al diez, seguidos del correspondiente número de manzanitas para que las pueda contar.

No identifica los números, no sabe cuál es cuál. El dice uno dos tres cuatro, pero no es capaz de identificar los números sobre el papel. Madre mía, y cómo le explico yo ....

Dos horas pintando manzanitas, grandes, pequeñitas, metiéndolas y sacándolas de una cesta. Dos horas esciribendo números que tuvieran algo que ver con esas manzanitas. (¿ Y para qué lado quiere que le pinte el siete, tía ?)

Confieso que durante unos instantes tuve tentaciones de matar a Luis Felipe pero me pareció más constructivo insitirle una y otra vez. Al fin y al cabo, el pobre no protestaba, se le veía cansado ya de hacer dibujos absurdos y adivinar un resultado que nunca coincidía con el real, pero aún así no protestó y eso le salvó de la muerte por ahogo en mis manos, y a cambio, todo parece indicar que ha aprendido a sumar.

Ocho. Son ocho tía, ni siete ni seis, son ocho, conté las manzanitas y son ocho, y el ocho se pinta así : 8.

Momento de Gloria, Aleluya, Gracias Señor.

"Enhorabuena, Luis Felipe, pues acabas de hacer ¡¡UNA SUMA!!" y Luis Felipe me mira sonriente y tremendamente orgulloso.

Hoy Luis Felipe aprendió mucho más que a sumar. Aprendió a sentirse capaz de aprender, aprendió que con paciencia y un poquito de esfuerzo se consigue algo tan lejano, tan distante, tan difícil.... como aprender a sumar.

2 comentarios:

manolo dijo...

!!!!! bravo por LUIS FELIPE !!!! y bravo por ti y tu paciencia , yo ya me habria convertido en Anibal Lecter y me habria comido a LUIS FELIPE jejejej y de postre a alguno mas ,

Gustavo Catala Sverdrup dijo...

Bien por Luis Felipe y por cada minuto de la paciencia ...

Un beso,

GG