CARTAGENA

Para los nuevos en este blog, y como recordatorio para los viejos socios, hoy hablamos de Cartagena, de la que se pueden decir muchas cosas, y casi todas ellas con un matiz drastico, radical. (el teclado me impide poner acentos, sorry)
La ciudad amurallada, que cada año atrae a miles de turistas venidos de todas partes del mundo es brutalmente hermosa.
El que llega por primera vez y se planta en el centro de la ciudad, se siente de pronto pequeñito incluso habiendo visto otras maravillas arquitectonicas igualmente impresionantes, la ciudad amurallada tiene algo mas que encanto. Es grandiosa, policromada, llena de vida. Y uno lleva inevitablemente su mente al pasado e intenta imaginarse la ciudad en aquella epoca en la que tantas y tan bellas construcciones fueron erigidas. Y entonces llegan los primeros contrasentidos, por ejemplo, cuando uno se para a admirar cierto edificio y acierta a leer en una placa "Palacio de la Inquisicion".... o aquel bello bulevar que sale de la Torre del Reloj, flanqueado por estatuas de heroes nacionales que cayeron por la patria en manos del enemigo español...
Varias multinacionales, algunas de ellas colombianas y muchas españolas, tienen sede en la ciudad, y por otro lado, el turismo nacional y extranjero aumenta y con el la construccion de enormes edificios de apartamentos con vistas al mar que recuerdan a la España de otros tiempos.
En Cartagena uno puede encontrar hermosas playas, y exquisitos restaurantes a buenos precios, eso si, para un español.
Esta es la Cartagena que conoce el 90% de la gente que algun momento de su vida pasa por aqui.
Pero hay otra Cartagena, que se hace cada dia mas grande y que se asoma a la muralla, impertinente, reclamando la atencion del visitante. Siempre puedes mirar para otro lado, pero alguna vez, aunque solo sea por curiosidad, alguno se anima a conocer lo que hay del otro lado de estos robustos muros que parecen querer proteger su tesoro, como antaño, aunque ahora de un enemigo distinto.
Gracias a Dios la clase media va creciendo, acortando minimamente la distancia entre los ricos - que aqui son verdaderamente ricos - y los pobres - que aqui son mas bien pauperrimos. Aun asi, la pobreza invade insultantemente esta bella region caribeña, consecuencia en parte de la obligada migracion de enormes grupos de gente literalmente despojada de todos sus bienes por la guerrilla.
El turismo creciente le da un respiro a la economia local, pero como siempre hay turistas y turistas, y cuando el hambre aprieta y algun gringo te ofrece por un ratico asqueroso mas plata de la que no ganaras aqui en un mes.....es para pensarselo.
La mayor parte de la poblacion aqui es negra, descendiente de esclavos africanos, y bien es sabido como cotiza en Europa la carne de mulata, tanto mas si es menor y linda como son aqui todas las adolescentes.
Tambien el negocio de la droga hace aqui su agosto con los jovenes. Sin trabajo, sin perspectivas de futuro, y frecuentemente sin educacion, es muy facil enganchar a niños y jovenes, que logicamente tienen luego que buscarse la vida para alimentar a ese bicho sanguinario y caprichoso que sin darse cuenta se ha hecho dueño de pronto de sus vidas y de sus almas.
Y esto es Cartagena, brutalmente bella y en la misma medida, cruel.
Consciente de su probable destino, la gente vive el dia a dia sin preocuparse demasiado del mañana, comparte lo que tiene hoy, y reza porque mañana tambien haya algo que comer.
Y como en toda America Latina, la musica es ese balsamo milagroso que parece curar penas y heridas y recordarle a uno por un breve instante lo bello que es vivir.